Cuando tenía 16 años, hace casi 40, me compré un telescopio que todavía conservo y lo tengo en un lugar preferente de casa.
Cuando leí la última novela tenía 26 años, hace casi 30. Era una novela de ciencia-ficción, que me encantaba.
Dejé la lectura y la cambié por el estudio de algo que me atraía tanto como la Astronomía. Lo nuevo me atraía por ser la dimensión mínima del rango astronómico: la Psicología.
La inmensidad del Universo y la inmensidad de nuestra mente. Dos elementos muy similares.
El Universo y la Mente son inescrutables en un 90% pero ahí los tenemos.
El ser humano tiene tarea suficiente para entretenerse, sobre todo cuando se deje de tantas guerras.
Y para entretenernos os dejo una web muy buena sobre imágenes que sólo sería capaz la mente de imaginar y la Astronomía de mostrar.
La web: Telecopio Hubble