La lluvia en Sevilla es una maravilla.
Frase hecha famosa por una película en la que a una señorita pobre le enseñaban modales, y no recuerdo la película, pero es famosa.
La lluvia en Sevilla no es tan pródiga como debería ser, pero en los últimos años está lloviendo bastante. Los pantanos están bien repletos de agua.
He conocido períodos de sequía en los que se ha racionado el suministro de agua potable. Que agotada la de los pantanos hemos tenido que beber las del río Guadalquivir.
En Sevilla llueve a partir de octubre hasta la primavera, pero siempre llueve cuando es la Feria de Abril y en Semana Santa, no falla.
Y algún tormentón en agosto también es usual.
Pero es una ciudad calurosa. La parte más alta de Sevilla tiene una altitud de 12 metros sobre el nivel del mar; debido a esta baja altura podemos observar cómo las mareas marinas afectan al nivel de las aguas del río. Y el mar está a unos 100 kms. El río al paso de la ciudad está entre dos altos terraplenes que se han hecho para evitar las frecuentes inundaciones que se producían hace muchos años.
Y todo los ciclos de lluvias que podemos padecer se ben a que el Sol es una estrella variable, varía un 0,1 % en 11 años. Tenemos, todo el planeta, ciclos de 11 años, más los nuevos fenómenos que se están presentando por el calentamiento global. Más el Niño y la Niña. Y su madre, digo yo.